jueves, 30 de julio de 2009

Los 10 Mandamientos De La Playa



LOS 10 MANDAMIENTOS DE LA PLAYA

1. No te mearás encima de las rocas

Aunque no puedas aguantarte más y creas que estés a punto de reventar, no te mees en las rocas. Por mucho que digas que te gusta sentarte en un pedrusco para contemplar el horizonte y disfrutar de la brisa marina, todos sabemos que es mentira y lo que estás haciendo es disimular para que no se note lo que haces.

2. No te llevarás la crema solar en vano

Te la pondrás antes de salir de casa y te la reaplicarás frecuentemente, especialmente después de bañarte o secarte. Que luego te quedas rojo como un tomate, frito como una gamba y te pelas como un fuet (literalmente), y aún te sorprendes.

3. No te bañarás cuando haya bandera roja

No es que los socorristas la pongan por joder a los bañistas. Ni tampoco es ninguna apuesta para ver quién es el primero que sufre una combustión espontánea por culpa del sol abrasador del mediodía. La ponen porque ven que el mar está un poco alteradillo y creen que puede ser un poquitín peligroso que te metas en el agua cuando soplan vientos de 80 Km/h, hay olas de 2 metros de altura, fuertes corrientes marinas y remolinos.

Que tú te crees muy valiente y luego aparece tu cadáver medio descuartizado flotando a 2 Km de la costa. Y aún te sorprendes.

4. No te bañarás cuando haya marea roja (sólo chicas)

Sí, ya sabemos que es una putada que te venga la marea roja en pleno verano y en los días más calurosos pero, más desagradable es estar nadando y encontrarte con una compresa (que normalmente suele estar usada) justo delante de tus narices. MUY desagradable. Y repugnante. En serio. Hazte un favor a ti y al resto de la humanidad y, cuando estés en esos días, por favor, quédate en tu casa comiendo chocolate y viendo Yo Soy Bea.

5. No colocarás la sombrilla en un día ventoso

Sí, está muy bien que quieras protegerte del sol para no quemarte la piel, bla bla bla. Pero, por favor, no la utillices cuando veas que hace una ventolera lo bastante fuerte como para que el palo del parasol salga volando y te saque un ojo. O peor aún. Que se lo saque a un playero inocente e indefenso que no tiene la culpa de tu estupidez.

6. No te olvidarás ni la botella de agua ni el chuff chuff*

Puedes llevarte las sombrillas y las cremas solares que haga falta, que si se te ha olvidado una botella de agua, un zumo o algo para no deshidratarte, estás jodido.

Sí, tienes otras alternativas, ir corriendo como un lagarto basilisco para no quemarte los pies hasta el chiringuito más cercano y comprar algo de beber que te va a costar más dinero del que llevas encima, o también puedes beber agua de las duchas, en cuyo caso la gente de tu alrededor te mirará como si fueras... un lagarto basilisco.

*Chuff Chuff: Dícese del recipiente vaporizador que sirve en los días de bandera roja o, en su defecto, en los días de marea roja, para poder rociar con agua y refrescar tu cuerpo serrano sin necesidad de bañarse.

7. No harás topless si tu cuerpo no está capacitado para ello

Está muy bien que no quieras que te queden las marcas de bronceado. Nos parece admirable que sigas queriendo quitarte la parte de arriba del bikini aún teniendo un cuerpo que, no nos engañemos, ya no es lo que era. Es estupendo que estés orgullos@ de tu cuerpo y quieras lucirlo. Pero, por favor, no lo luzcas en público, y mucho menos a la hora de la merienda, que hay niños, ten piedad.

8. No te colocarás a menos de 5 metros de tu vecino playero

Es muy bonito estar rodeado de gente y conocer nuevas personas. ¡Ah, la amistad! ¡Cuánto compañerismo! ¡Cuanta alegría! ¡Unámonos todos! ¡Paz y amor! (¡y el Plus pa'l salón!). Pero en la playa NO.

Vamos a ver, piltrafilla. Me parece muy bien que quieras estar cerquita de la única persona que hay en un radio de 50 dunas de arena (y si ya es una chica haciendo topless y rociando su cuerpo con el chuff chuff ya ni te digo). ¿Pero no te has parado a pensar que esa persona se ha puesto en ese lugar por una razón? Quiere relajarse, quiere tranquilidad, quiere paz, quiere esuchar el sonido de las olas, quiere transportarse en el mundo del libro que está leyendo... O sea: ¡Quiere que dejes de tocarle los ******* de una **** vez!

Sino, es muy posible que pierdas un ojo "accidentalmente" (véase punto 5).

9. No harás el gilipollas

Sí, tú, que te pones a bailar, cantar, saltar, correr, gritar, berrear, llorar, decir estupideces, hacer el pino-puente, rebozarte en la arena, jugar a pelota y todo lo que se te pueda ocurrir con tal de fastidiar a los del punto 8.

En la playa ni se baila ni se canta, para eso están las discotecas.
Si corres o saltas, procura no levantar una tormenta de arena, más que nada porque a los demás no nos gusta demasiado como aperitivo.
Si quieres gritar, berrear o llorar, hazlo debajo del agua, por lo menos no te va a oir nadie.
Si quieres rebozarte en la arena, tú mismo, pero te aviso que se te meterá en sitios insospechados que ni tu mismo sabes que existen (lo mismo vale para los que os sentáis en la orilla del mar y esperáis a que os bañen las olas).
Ya que vas a decir estupideces, por lo menos dilo en voz baja (o debajo del agua), para que nadie sepa lo estúpido (valga la redundancia) que eres. Qué es eso de: "Buah, tiaaaa, veeeen, ¡hay peces en el agua! ¡Qué supermegafuerte!". Vamos a ver, álmara de canto, pero, ¿qué esperas que haya? ¿Elefantes?

10. ...

Me falta el número 10. ¿Alguien me ayuda a acabar? :-)

sábado, 18 de julio de 2009

Steve Lukather en Barcelona - Parte II

La última vez que fui a un concierto en la sala Luz de Gas, fue el 1 de julio del año pasado, a ver Alan Parsons Live Project. Bueno, no, ahora que me acuerdo... la última vez fue en septiembre, a ver el grupo donde toca mi hermano (no te quejarás, ¿eh? ¡Que últimamente te estoy haciendo mucha propaganda!)

Me gusta mucho, esta sala, es pequeña, acogedora, tiene muy buena acústica y, normalmente (o al menos las veces que he estado), la gente que va es bastante sensata y no intenta liquidarte para conseguir estar en primera fila. Bien, ahora que lo pienso... como mucho sólo habré estado en dos o tres conciertos donde el público haya estado tranquilo, escuchando música pacíficamente, sin molestar, ni empujar ni querer arrancarte los ojos.

De hecho, lo tengo comprobado: los instintos asesinos de algunas personas del público son directamente proporcionales al grado de belleza de los músicos. O sea, cuanto más buenorros estén los del grupo, más probabilidades habrá de que tu cuero cabelludo acabe al otro lado de la sala. Claro que puede haber alguna excepción, como es el caso de los Rolling Stones... Y esto último que cada uno se lo tome como quiera ... ¬¬

Llegamos a la sala sobre las 19.30. Para sorpresa nuestra sólo había un par o tres de personas haciendo cola, lo que hizo que mis hermanos y mi padre (que también se apuntó) se pusieran de mala hostia por haberlos hecho salir de casa tan temprano :-)

Lo que pasa es que estoy acostumbrada a tener que hacer 6 horas de cola o más para poder estar en un lugar decente, en un concierto. Pero, como ya he dicho antes, cuánto más cerca estés del escenario, más corres el riesgo de acabar sin capacidad auditiva o con una extremidad menos.

Por suerte, como la mayoría de fans de Toto y de Lukather supera los 30 años y, por tanto, se supone que ya tienen el cerebro bien desarrollado, no había ningún peligro. Claro que también hay excepciones... Y ésto que cada uno se lo tome como quiera... >:)

A las 20.30 abrieron las puertas, pero todavía no había tanta gente como me esperaba. A las 21.00 tocaron los teloneros que, lo siento mucho, pero no tengo ni idea de cómo se llamaban. De hecho, por no saber, no sabía ni que había teloneros. Tocaron en acústico, media horita, hasta las 21.30. A esa hora la sala ya estaba bastante llena.

A las 22.00, ni un minuto más ni un minuto menos, se apagaron las luces y, con el clamor unánime del público, Steve Lukather salió al escenario. Lo acompañaban tres magníficos músicos:
Steve Weingart a los teclados, Carlitos del Puerto al bajo y Eric Valentine a la batería.


Steve Lukather & Carlitos del Puerto


Carlitos del Puerto


Steve Lukather - No se ve muy bien, pero me miró directamente, de ahí ese ataque de Parkinson al hacer la foto


Steve Lukather


Carlitos del Puerto

Tengo que decir que días antes, estuve googleando a ver si en los anteriores conciertos de Madrid o Las Palmas habían tocado algún tema de Toto. Es más, tenía la ilusión de que quizás caería alguno, como Rosanna o Don't Chain My Heart, pero no fue así.

Como anécdota, al principio del concierto, entre canción y canción hubo alguien que gritó: White Sister! Y Steve le miró e hizo un gesto como diciendo: "Tsss ... Estás flipando o qué?". La expresión que puso en ese momento fue para partirse!


Steve Lukather - Ésta es la misma cara que pongo yo cuando hay paella los domingos


Steve Lukather


Eric Valentine - Animando al público


Steve Lukather

Tengo que reconocer que hasta entonces no había escuchado nada de su carrera en solitario, y la verdad es que durante las primeras canciones estaba bastante paradita, pero después me empecé a animar y a mover la cabeza siguiendo el ritmo de la música.

Una de las canciones que más me gustó fue precisamente la que da nombre a su último disco, Ever Changing Times. Recuerdo que era esta por el riff de la guitarra, y también por el estribillo, bastante pegadizo, y donde Steve dejaba cantar al público.


Steve Lukather - Ever Changing Times


Steve Lukather & Carlitos del Puerto


Carlitos del Puerto


Steve Lukather

También tocaron Song For Jeff, un homenaje a Jeff Porcaro, que pertenece al segundo disco de Lukather. Este es un fragmento que pude grabar:




Más tarde, cada uno hizo su particular solo. Los músicos que acompañaban a Steve eran unas máquinas y los tres hicieron unos solos increíbles, sobre todo Eric Valentine y Carlitos del Puerto. Eso sí, el que se llevó la palma, sin duda, fue Eric. Hubo más de una ocasión en que dejó al público con la boca abierta, y no era para menos.

Cuando llegó su turno, hubo un momento muy cómico, donde los dos Steve y Carlitos se acercaron y le pusieron una toalla en la cabeza. A pesar de no poder ver nada, Eric continuó tocando como si nada, ante la mirada atónita de todos, y las risas de sus compañeros y del público. Éste era un momento perfecto para grabar en vídeo, pero soy idiota y no tuve tiempo ni de reaccionar... Estaba tan empanada disfrutando de aquella demostración que no quería apartar la vista del escenario ni un momento. Y es que aquel magnífico solo fascinó a todo el público.


Carlitos del Puerto - Después del solo de bajo


Steve Lukather


Eric Valentine

Tras el clamor del público cantando el típico: "Oeee oe oe oeeeee" durante el bis, volvieron a salir al escenario para deleitarnos nada más y nada menos que con una magistral versión de Pink Floyd, la de Shine On You Crazy Diamond. Las primeras notas, inconfundibles para todos, hicieron que el público estallara con gritos y fuertes aplausos. También era un momento idóneo para grabarlo en vídeo, pero... ¿recordáis que soy idiota? Pues eso...

El concierto duró una hora y 45 minutos, más o menos, ¡pero se me hizo tan corto! Al final se despidieron con un... ejem... baile... Cuanto menos, gracioso... Aquí mi grado de idiotez bajó porque fui capaz de coger la cámara y grabar el momento:




En definitiva, ¡fue un gran concierto! Seguramente lo habría disfrutado más si hubiera conocido algunas de las canciones pero, aun así, me lo pasé muy bien, y lo volvería a repetir sin duda! Además, sólo por el hecho de haber podido ver las maravillas y las improvisaciones que son capaces de hacer estos cuatro músicos, ya valió la pena.

See you soon, guys!!!


Steve Weingart, Steve Lukather, Carlitos del Puerto & Eric Valentine


P.D: Por cierto, el telonero era Jordi Sandalinas! Lo digo para que podáis dormir tranquilos esta noche :-)

viernes, 17 de julio de 2009

Steve Lukather en Barcelona - Parte I

El pasado lunes día 13 de julio, el gran guitarrista Steve Lukather (uno de los miembros fundadores del mítico grupo Toto), visitó Barcelona para presentar su último disco en solitario, Ever Changing Times.



La verdad es que si me hubiesen hablado de él un par de años atrás, no habría tenido ni pajolera idea de quién era... Pero mi hermano (sí, aquel que le dan miedo los calamares rellenos), que entonces iba a clases de batería, tenía una especie de obsesión por un baterista muy famoso, un tal Jeff Porcaro, que había sido uno de los miembros fundadores de Toto, junto con David Paich y Steve Lukather.

A partir de entonces, en nuestra casa no se escuchaba otra cosa que no fueran las canciones de Toto y frases del tipo:
¡Jeff Porcaro es el puto amo!
Total, que a mí también me acabó gustando el grupo, sobre todo canciones como las de Hold The Line, Africa, Don't Chain My Heart y Child's Anthem, entre otras.

Más tarde supimos que Toto habían estado recientemente de gira en España (Barcelona y Madrid en julio del 2006, y Bilbao y Zaragoza en abril de 2007), y para sorpresa de todos, se ve que aquella era la última gira que hacían, ya que habían anunciado que el grupo se separaba.

Pero en junio del 2007, me fui de viaje con unas amigas a Holanda, en el Arrow Rock Festival (por si alguien no lo sabe, os diré que se trata de un festival de rock que lo celebraron a las afueras de Biddinghuizen, un puñetero pueblo perdido a 75 Km de Amsterdam) donde tocaban los Europe y, casualmente, también actuaba Toto. ¡No me lo pensé dos veces! Aquel 30 de junio fue la primera vez que los vi en directo. Había 5.000 personas entre el escenario y yo, y entre eso y mi miopía de mierda, no es que viera gran cosa, pero al menos pude disfrutar de Hold The Line y Africa en directo.

Por lo menos me lo pasé bien durante los conciertos, cosa que no puedo decir del fatídico viaje de vuelta en avión... sólo diré que nuestro vuelo tenía que salir domingo al mediodía, pero no aterrizamos en Barcelona hasta la noche del lunes siguiente. Otro día hablaré de por qué no voy a volver a ir a ningún festival de rock y por qué no voy a volver a volar nunca más con Fuckair Clickair.

Total, y volviendo al tema que interesa... Ahora hará unos dos meses, mi hermano me dijo que el Steve Lukather venía a Barcelona a presentar su nuevo disco en solitario. No estaba muy segura de querer ir, ya que no había escuchado nada suyo, pero no me podía perder la oportunidad de ver uno de los mejores guitarristas del mundo sobre el escenario.